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Aprender acerca de una mentalidad colaborativa (fuera de la caja) es empoderante. Vivirlo lo es aún más. —————-- Por Sam Whitney, Gerente de Desarrollo de negocio global, The Arbinger Institute - Marzo 13, 2018 ————-- Cuando me presentaron los principios de Arbinger por primera vez, me enamoré. Fué como si estuviera viendo el mundo a color por primera vez, con todas sus tonalidades y vibraciones. ¡No podía tener suficiente! Me encontré leyendo apasionadamente todo lo que podía! Leí acerca de una mentalidad individualista (dentro de la caja), en donde estamos efocados en nosotros mismos y fallamos en ver a las personas como personas. Sólo los vemos como vehículos para nuestros objetivos, obstáculos en nuestro camino, o irrelevancia para ser ignoradas. Leí acerca del auto-engaño. Cuando nos auto-engañamos, no nos damos cuenta de nuestra mentalidad individualista. Tendemos a culpar a otros por nuestros problemas, en lugar de darnos cuenta de que probablemente somos parte de la causa también. Y leí también acerca de la mentalidad colaborativa (fuera de la caja), que nos libera del auto-engaño. Con una mentalidad colaborativa, vemos a otros como personas. Nos damos cuenta de que importan tanto como nosotros. En su momento, cambiamos nuestro enfoque para incluir a otros y sus objetivos. Esos conceptos fueron muy iluminadores para mi… pero me di cuenta de que aprender acerca de una mentalidad colaborativa no es lo mismo que vivir una mentalidad colaborativa. Una mentalidad individualista rondando Dedique las horas en mi recorrido diario en tren reflexionando acerca de las implicaciones del auto-engaño. Podía finalmente ver cómo yo era parte de los problemas en mi vida. Experimenté una gran emoción y libertad increíble al darme cuenta de esto. Si yo era parte de esos problemas, también estaba en mi la capacidad de cambiarlos. Sin embargo, algo estaba mal. A pesar de todo mi auto-descubrimiento, no estaba cosechando los beneficios prometidos de estos recien descubiertos principios. El problema era este: podía identificar ahora cuando tenía una mentalidad dentro de la caja, pero me encontraba aún atorado. Sin importar que tanto me esforzaba, encontré dificil mantener una mentalidad fuera de la caja. Tenía buenos momentos, algunas veces incluso dias completos… pero la consistencia que ansiaba me eludía. ¿Por que no podía mantener una mentalidad fuera de la caja? De rondando a vivir Finalmente, llevé mi dificil situación a un amigo de confianza que también estaba familiarizado con el trabajo de Arbinger. El preguntó. “¿Alrededor de que gira la mentalidad individualista?” “De uno mismo,” respondí rápidamente. “Es correcto,” dijo. Mi colega continuó. “Cuando tenemos una mentalidad dentro de la caja, estamos preocupados con nosotros mismos. Ahora, ¿crees que enfocandote en ti mismo te ayudará a dejar de estar dentro de la caja?” “No, por supuesto que no.” Repentinamente me di cuenta de cual era el problema. ¡Estaba tratando de resolver mi mentalidad dentro de la caja estando dentro de la caja! Me había estado enfocando sólo en mi mismo y en todas las maneras en que tenía una mentalidad fuera de la caja. “Entonces, ¿Cuál es la solución?” pregunté. “Comienza a vivir una mentalidad fuera de la caja. Se curioso acerca de otras personas. Aprende acerca de ellas. Cuando hay un momento en que puedes ser de ayuda, se de ayuda.” Aunque reconociendo cómo yo tenía una mentalidad dentro de la caja era un buen primer paso, había fallado en dar el siguiente paso: salir de la caja. Esta solución simple puede parecer obvia o incluso demasiado simple, pero para mi, fue revolucionaria. Viviendo una mentalidad fuera de la caja Me di cuenta de que era como un vendedor ambulante sentado en su habitación escuchando grabaciones motivacionales en lugar de darle al pavimento y cerrar ventas. Descubrí también, que parte de mi temía vivir una mentalidad fuera de la caja. Era más fácil sentarme en mi torre elevada y contemplar la teoría de una mentalidad fuera de la caja. Vivirla requirió algo de valentía de mi parte. Vivirla significó ir hacia otros y conectar con ellos. Sin embargo, encontré que una vez que dejé de enfocarme en mi mismo y cómo veía a la gente, podía verlos realmente. Encontré una mayor conexión con otros de lo que nunca pense posible. Aún más, mi creatividad se encendió. ¡Ví muchas formas diferentes en que podía ser de ayuda! Una mentalidad fuera de la caja enriqueció cada parte de mi vida y a aquellos a mi alrededor. Una mentalidad fuera de la caja sólo puede traer los cambios que necesitamos si estamos dispuestos a cambiar y actuar. Cuando encontré por primera vez los principios de Arbinger, me enamoré… con una mentalidad fuera de la caja. Una vez que fui cambiando mi mentalidad para estar fuera de la caja y actuar conforme a esto, lo que comencé a apreciar aún más fueron las personas que me rodean. Si tu también, quieres aprender más acerca de los principios de Arbinger, ¡agrega estos libros a tu lista de lectura! |